¿Por qué necesitamos ambientes seguros?

¿Por qué necesitamos ambientes seguros?

Cada vez que respiras o tocas algo estás en contacto con patógenos potencialmente peligrosos

Según los estudios realizados por la OMS y la EPA (USA) en 2013, pasamos el 90% de nuestro tiempo en interiores.

21,5 horas al día dentro de nuestros hogares, oficinas, centros comerciales, colegios, hoteles, restaurantes, retail, hospitales, medios de transporte…

Respirando casi 10 mil litros de aire y en contacto con todo tipo de superficies llenas de patógenos potencialmente peligrosos.

Virus, bacterias y hongos siempre han estado presentes, y ahora se transmiten con mucha mayor rapidez. Nuestro mundo cada día más acelerado e interconectado facilita los contagios.

Todos somos vulnerables. Los patógenos pueden causarnos daños irreparables.

Covid, gripe, hepatitis, infecciones gastrointestinales, neumonías, tuberculosis, infecciones nosocomiales (las que cogemos cuando estamos en los hospitales) o alergias son algunos de los impactos que tienen sobre nuestra salud.

Hasta ahora pensábamos que la desinfección era solo un problema del sector sanitario. La pandemia ha cambiado nuestra forma de pensar.

La OMS calcula que las infecciones serán la primera causa de mortalidad en todo el mundo en el año 2050.

La desinfección del aire y de las superficies son clave.

Todos deberíamos estar protegidos y podemos hacerlo.

Con la limpieza solo desinfectamos el 32% de las superficies.

La calidad del aire en el interior de los edificios es hasta 5 veces peor que en el exterior.

Edificios inteligentes, falta de ventilación o condensación, hacen que los patógenos evolucionen en condiciones óptimas para acabar dañándonos.

¿Quién no ha pasado nunca una gripe porque le han contagiado?

Más allá del coste económico para la sociedad (más de 1.000 millones en España) el cambio en nuestros hábitos de vida mientras estamos enfermos, lo mal que nos encontramos, la pérdida de dinero y de tiempo (en el mejor de los casos) no debería producirse.

La luz UVC, una solución contrastada

Una protección que no se vea afectada por las nuevas enfermedades infecciosas (o sus variantes), o por las resistencias generadas por los patógenos a los antibióticos o a los productos biocidas. 


Una protección que ni siquiera necesite identificar al patógeno para combatirlo.

Una protección que durante décadas ha estado reservada a zonas de alto riesgo de grandes hospitales y ahora ponemos a tu alcance.
 
Una protección que elimine el 99,99% de virus, bacterias, ácaros, hongos y otros patógenos abalada por los más prestigiosos laboratorios de microbiología del mundo.